Rachel Berry nació del verdadero amor según sus padres biológicos. Sus padres consiguieron una madre basandose en dos cualidades básicas: la inteligencia y la belleza. Siempre le dieron a Rachel todo lo necesario para convertirse en la estrella en la que ansía convertirse.
Ella es perfeccionista y adicta a la actualización de su perfil en MySpace, se pasa el día añadiendo videos, los cuáles son motivo de burla de Quinn y sus compañeras pero este personaje se nos presenta como una chica dura y capaz de soportar las frivolidades del resto de alumnos.
A lo largo de la serie es normal encontrarse a Rachel por los pasillos tratando de esquivar los refrescos que los populares tratan de arrojarle a la cara. Su sueño es ser actriz de Broadway y no duda en ningun momento en tomar decisiones importantes en el Glee Club si el objetivo es la posibilidad de llegar a serlo. Aunque gracias a su perfeccionismo y su afán de protagonismo y mandato, el Glee Club avanza en sus principios más desastrosos, no es muy apreciada por sus compañeros.
Personalmente es uno de mis personajes favoritos tiene una gran voz y en las actuaciones es capaz de deslumbrar como nadie.
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